UNA TRAGA MALUCA
El primer cassette que tuve en mi vida, es decir hace bastantes añitos, era de U2, exactamente el WAR. Poco entendía de ingles, pero me puse en la tarea de traducir. Cuando logré comprender lo que decían las letras, fue el comienzo de mi traga maluca. Pensaba que ellos, U2, eran los más sufridos, los más humanos, los más nobles y los más rebeldes, caracteristicas que hoy en día me sedUcen de un hombre. Valga la aclaración de: noble pero no......
Bueno, después de cantar a grito herido "Sunday bloddy sunday, sunday bloddy sunday" llegué a NEW YEARS DAY y no se porque, tal vez una premonición del destino, me enamoré del sonido del bajo. Digo premonición porque después de un par de añitos, me enovie con un bajista.
Después de un tiempito me regalaron el LP de Rattlle and Hum, ah no, miento, primero me regalaron el VHS, y después el LP.
El VHS se convirtió en un rito. LLegaba del colegio todos los días, me sacaba la camisa de la falda, me quitaba las medias, cerraba la puerta del estudio, ponía el VHS, le subía todo el volumen a PRIDE y comenzaba la transformación.
Quería ser BONO, me movía como el, o por lo menos asi lo creía. No me puedo olvidar de lo que sentía cuando prendían las luces del escenario y The Edge hacía un solo, ufff, erizada, ojo encharcado y todo lo demás. Después de devolver ese momento un par de veces, le bajaba el volumen y salia del estudio recargada de BONO.
Después llegaron las camisetas a mi vida. No creía en nadie con mi camiseta de WAR. Tenía otras de otros grupos que para que mencionarlos, no le voy a robar el protagonismo a mi traga maluca.
Hice audiocones en bares, cuando nisiquiera sabía a que sabía el trago. Solo ponía mi música y mis videos y trataba de demostrarle a la gente lo tragada que estaba de ellos. de BONO.
Así pasaron muchos años, hasta el día que viajé a Londres. Como olvidar la salida de Victoria Station y encontrarme con una valla gigante de ellos. De su nuevo albúm, para mi el mejor de todos, All that you can leave behind.
Un mesesito después, tomando sol en el parque de Ealing Broadway, descubrí otra joya en WAR, y como ya entendía mejor el ingles, la entendí toda. Y esa canción me puso a llorar. Bueno, estaba despechada en ese momento y la letra pegaba al pelo.
Oí tantas veces ese último disco. Tantas, tantas, tantas, que ya me dieron ganas de oirlo. Voy a ponerlo.
Argentina.
Pasarón otros añitos, hasta que me encontré en el camino con mi negro. Fan de U2, con el único hombre que sería capáz de caerme a golpes, si BONO en un concierto le estirara la mano para subirlo a el a la tarima. Ese es mi lugar.
Hace un par de meses, el negro me dice: U2 en Argentina. Bono en Sur América. No tuvo que decir más.
Con mis ojos le dije, hagamos lo que sea, nos vamos para Argentina. Y así fue.
Me fui y nuevamente llegué a una ciudad invadida de mi traga. Me sentia tan tan cerquita de ellos.
Concierto.
Me prometí a mi misma que no iba a llorar, pero que va, cuando el me cantó ONE, porque estoy segura que era para mi, no pude más y buaaaaaaa!!!!
Creo que en Argentina no me quieren vovler a ver, porque dejé malitos del oído a bastantes personas con todo lo que les grité que los amaba.
Colombia.
Volví invadida de el. De ellos. Y AHORA ENTIENDO TODO. Ellos tienen tanto de mi, y yo siento que tengo todo de ellos.
BONO, te amo. Los amo.
